Las sucesivas crisis han sido una prueba para muchas de estas instituciones que forman parte de la vida cotidiana de tantas generaciones y, para otros, una tormenta que los ha obligado a cerrar sus puertas. Pero hoy… cuál es la situación que atraviesan?
A la cuota mensual muchas veces deben sumar actividades como rifas, venta de pollos o empanadas, cantina abierta a toda hora y alquiler del salón. Actividades en las que la familia entera participa y colabora activamente.
Pero, ¿les alcanza para sostenerse?, ¿De dónde más sacan recursos estas entidades para hacer frente a los embates tarifarios de la luz y el gas? ¿Qué rol asume o debería asumir el Estado frente a estas instituciones?
En El Ventilador, «abrieron la puerta del club del barrio» para saber cómo son y qué sucede en el interior de estas instituciones y cuáles son las políticas implementadas para fomentarlos y sostenerlos.
Apoyo gubernamental
La provincia de Entre Ríos se encuentra adherida a la Ley Nacional 27.098. A través de la misma se creó el «Régimen de Promoción de Clubes de Barrio y de Pueblos», dirigida a fomentar este tipo de instituciones.
La ley establece líneas de acción y entrega de aportes para sostener y promover las entidades que no tienen fines de lucro y que tampoco se dedican al deporte a nivel profesional, sino que tienen el objetivo de la inclusión social e integración colectiva.
La norma está pensada para aquellas instituciones que cumplan con determinados requisitos, como poseer personera jurídica y una cantidad mínima de cincuenta socios y una máxima de dos mil, al momento de la inscripción.
A su vez, la iniciativa establece que el área de Deporte, complementándose con el Ministerio de Salud y la Secretaría de Prevención de la Drogadicción, así como con organizaciones públicas o privadas, debe brindar periódicamente, a los clubes de barrio, capacitación en sexualidad responsable y programas de prevención de adicciones.
Los clubes de barrio han sido históricamente, espacios de encuentro y socialización.
Estos clubes son, sin duda, un lugar de contención, que aleja a mucha gente de los riesgos propios de la calle, los peligros permanentes y contingencias de toda naturaleza.
Las instituciones deportivas enseñan y permiten desarrollar determinados valores que se proyectan a lo largo de toda la vida. Y en muchos casos han sido el semillero de muchos deportistas de alto rendimiento y profesional.
Clubes en época de crisis
Las «tormentas» que atraviesa la economía actual del país, no discriminan a los clubes de barrio, que también sufren la suba de precios, el achique de gastos, los tarifazos.
Si bien en Entre Ríos existe una ley que protege a los clubes para que éstos no puedan ser embargados, las deudas, los costos laborales, los servicios y los insumos, condicionan el funcionamiento de estas instituciones que cada tanto son noticia porque corren riesgo de quiebra. Incluso, la situación de crisis en la que estamos inmersos seguramente hizo que más de una de estas entidades sin fines de lucro, tenga que postergar o paralizar proyectos y obras en marcha.
Nación, provincia y municipio, cada estado tiene una porción de compromiso para que estas instituciones sigan formando parte de la historia y que permanezcan en manos de quienes conserven los fines para las que fueron creadas.
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«Siempre un club recibe más dinero que otro y es algo que debería ser más parejo»
Marita Correa, de la Asociación de Clubes de Paraná, resaltó que «la mayoría de los clubes de Paraná no están habilitados. Estamos trabajando con el municipio para que lo logren. Es un proceso lento porque por la crisis que atravesamos hace que no haya dinero. Después de Cromañón hubo más precauciones, sobre todo en lo que respecta a bailes. En otros sí hay habilitación: se cambiaron las aberturas hacia afuera, las salidas de emergencia, la cantidad de baños necesarios para la gente que hay. Se necesita mucho presupuesto».
Asimismo, dijo que «hubo clubes que desaparecieron por no tener su habilitación escrita como debía estar».
Remarcó que «el tema del seguro es una cuestión que nos tiene preocupados hace mucho tiempo por lo costoso y porque cuando hay que llevar a atender al chico hay que tener el dinero en la mano inmediatamente. Nada sale menos de 10, 15 o 20 mil pesos. Cada club tiene que acudir a una póliza privada para poder tener esos beneficios».
«Acludepa nuclea a los 90 clubes de Paraná. En las reuniones que tenemos con los presidentes trabajamos todos juntos. Siempre un club recibe más dinero que otro y es algo que debería ser más parejo«, agregó.
Además, contó que «con la Federación Entrerriana de Clubes tenemos un proyecto que vamos a presentar para declarar a los clubes como patrimonios históricos. Se encuadra en el marco de que el estado debe hacerse cargo de la infraestructura, sobre todo en la parte edilicia e impositiva. Todos accederían a esta condición porque son patrimonio de cada barrio. Esto haría que podamos funcionar mejor».
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«La mayoría de nuestros jugadores son pescadores, tenemos una cuestión de identidad arraigada con la zona»
Bibiana Hermosid, de Club Ministerio, expresó que «es una de las instituciones más viejas, va a cumplir 96 años. El peor momento que tuvo fue cuando tuvo que trasladar su sede desde el Puerto hasta el terreno ubicado en calle Ambrosetti, que es propiedad del club, no es donado. De igual manera todavía tenemos parte de nuestra sede en el Puerto, donde está el quincho, la parte de boxeo, una sede social y algo que funciona como boliche bailable».
Actualmente cuentan con 300 socios, pero antes del traslado eran más de 1000. «Ese espacio era del gobierno de Corrientes, lo cedió a Entre Ríos y fue cedido al municipio. Cuando lo reclamaron debimos trasladarnos. Hubo compromisos de mejoras que no se llevaron a cabo y el club tuvo que empezar de cero», agregó.
Asimismo, dijo que «la mayoría de nuestros jugadores son pescadores. Tenemos una cuestión identitaria muy importante con todo lo que es la zona costera«.
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«Hay mucha demanda para que los chicos participen de una actividad deportiva»
César Roude, integrante del Club San Martín, remarcó que «tenemos 550 socios. Es una cifra que va creciendo, hay mucha demanda para que los chicos participen en una actividad deportiva. Nuestro club está quedando chico. Tenemos tantas actividades que se pelean entre ellos para ocupar la pista que tenemos».
Actualmente ofrecen básquet masculino, mamis básquet, patín artístico, vóley, karate, bochas. «Somos un club que inició con las bochas. Tenemos mucha participación familiar en las fiestas aniversario y de fin de año. Nosotros tenemos habilitación para bailes y un salón», contó.
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«La cuota mensual es un flagelo que sufrimos todos los clubes»
Héctor Steinert, presidente del Club San Agustín, manifestó que «en este momento rondamos los 400 socios, pero los activos son los chicos de las distintas disciplinas. Ellos pagan la cuota societaria y la cuota deportiva. Lo que más se practica es el básquet femenino y masculino. Los chicos han participado en varios torneos en poco tiempo y trajeron buenos resultados».
Resaltó que comenzaron siendo un club de básquet femenino: «hemos sido campeones a nivel nacional en 2002, 2003 y 2004».
Respecto a la cuota mensual, dijo que «es un flagelo que sufrimos todos los clubes. Hoy los chicos y chicas que practican la disciplina pagan 200 pesos más 150 de la cuota deportiva».
Comentó que «los accidente jugando o practicando son normales. Hay torceduras de tobillo, de muñeca y demás. Tenemos todo cubierto por el seguro. Si ocurriría algo más grave deberíamos salir a buscar dinero porque no lo tenemos».
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«Queremos formar un club, que sea lugar de contención»
Juan Berniguad, vecino de Barrio 4 de Junio, señaló que «nos donaron un predio de 69×234 metros, en calle Francia. Los vecinos lo estamos acondicionando y formaremos un club. Pero todo comenzó en el año 1993, cuando habíamos empezado a limpiar para hacer una canchita de fútbol. El propietario nos cedió el lugar con la condición de que siempre fuera una cancha. La mantenemos hasta el día de hoy».
El predio quedó chico. «Ahora las mujeres también quieren jugar al fútbol y nos piden un espacio. No podemos usar la misma cancha porque es chica, no tiene la medida reglamentaria. Siempre la mantuvimos porque era un basural«, relató. También un comerciante del barrio les donó los caños para hacer pasar agua.
Remarcó que «hablé con un sobrino del propietario y si bien está de acuerdo en que formemos el club, esos terrenos no se pueden vender. El terreno está donado de palabra y ya comenzamos las obras«.
«Vamos a luchar por el club, tratar de poner en regla la donación del terreno. Todos los vecinos estamos poniendo el hombro para esto. Hay chicos muy chicos que quieren jugar. Empezamos con una escuelita de niños de tres años. Queremos que sea una contención«, finalizó.
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«El Club Quique cuenta con 88 años de vida deportiva»
Ana Giménez es presidenta del Quique Club desde hace dos años. «Desde chiquita estuve en el club, desde que lo adquirieron. En un comienzo estaba en la escuela provincia de Santa Fe, luego adquirieron otro predio y ahí lo refundaron. Cuando comenzó esta institución deportiva y yo era chica íbamos a jugar al club, no hacíamos deporte. A ver los partidos de básquet, íbamos con la familia; además participábamos de los bailes de carnaval», rememoró.
«Lamentablemente nunca tuvimos habilitación, estamos peleando por ese tema. Estamos felices porque hemos conseguido la escritura del club, el grupo que tenemos al que llamamos de `los doce apóstoles` hacemos cosas, el club está lindo, pero nos falta dinero«, aseguró además Giménez. El Club Quique cuenta con 88 años de «vida deportiva».
«Desgraciadamente en el Club Quique no tenemos empleados; o tenemos empleados o hacemos las actividades pagándole a los profesores lo que les corresponde», puso relevancia.
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«Cuando asumimos había 36 socios; hoy son 450»
Roberto González es Vicepresidente del Club Peñarol. «Actualmente, la institución deportiva cuenta con unos 450 socios. «Por la situación económica, muchos de estos socios no abonan su cuota de manera mensual o regular. Por ahí tenemos un altibajo de pago de socios. Hace un año y seis meses tomamos la actual conducción del club y en ese momento, se contaba con 36 socios. Hemos trabajado en la recuperación de valores, en conversar con sus simpatizantes, con gente que le gusta el color del club y hemos llegado a la conclusión que la apertura que hemos tenido con la conducción del club, ha sido beneficiosa. Se ve que los dineros recaudados vuelven al club», mencionó.
«Cuando tomamos la conducción del club, se venía de la situación de que hacía siete meses que el club estaba a puertas cerradas, esto ha implicado que los papeles desaparecían. Era una situación muy complicada», expresó.
El Club Peñarol está ubicado en calle Pirán 704. La cuota en estos momentos está en 100 pesos. «Hay precios especiales para chicos de escuelitas `Cebollitas`. Que practican fútbol; ellos pagan 150 pesos. Además hay tarifas diferenciales, de acuerdo a los deportes: el gimnasio es´ta en 250 pesos si es socio, 300 pesos (para no socios). También hay precios diferenciales en vóley y futsal», acotó González.
Al ser consultado respecto a si cubren los costos de mantenimiento en la institución, manifestó: «No estamos de manera holgada, pero venimos bastante bien, a pesar de los altibajos».
«Hablando de política de Estado, vemos que lamentablemente viene desfasado la cuestión de la atención con el slogan `Primero los Gurises`. Nosotros nos adaptamos a un convenio que se hace a través de la federación, que los chicos de 5 a 20 años quedan asegurados desde la órbita del Instituto del Seguro. Hasta que te ocurre un accidente de un chico, como nos ocurrió, no somos conscientes de esa deficiencia. Un nene se molió el muñón de la muñeca, practicando fútbol, implicó que vaya a cirugía y que haya que ponerle un clavo bañado en titanio, con tornillos regulables: esta operación costó unos 77 mil pesos. La póliza del Instituto del Seguro que cubre a todos los chicos que hacen fútbol en Paraná, que brinda el Estado de la provincia, tiene una cobertura de hasta 10 mil pesos. Tuvimos que salir a buscar planta para garantizar la operación, la pusieron sus papás y hoy se la estamos devolviendo».
«Entendemos que hay una desactualización del Estado en materia de políticas para con el deporte, está lejano a la realidad«, opinó.
Asimismo destacó: «A nosotros el gobierno de la provincia nos ha ayudado con la iluminación de la cancha, si bien esto es importante, también es responsabilidad nuestra marcar ciertas cuestiones: los clubes que hacemos fútbol sentimos impotencia porque el gobierno no puede destinar semejante cifra para clubes como Patronato al que le brinda dos millones y medio de pesos, y para el resto, migajas. Recibimos 2500 pesos por mes, para cada uno de los otros clubes. Esta es la ausencia del Estado mismo para garantizar el futuro«.
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«Entre vecinos, dirigentes y socios, hacemos de todo»
Maria Galván es vicepresidenta del Club Sportivo. «La cuota es de 100 pesos, el familiar 150, depende del adherente. Al sumar más disciplinas, además del fútbol, en el que tenemos más de 400 chicos, se suman más con vóley y patín artístico», manifestó.
Los dirigentes del Club Sportivo pasaron por la particular situación de «tener que vender la sede». Dijo que «fue la anterior comisión. Yo hace más de un año que estoy en esta comisión. La idea fue trasladar la sede, el salón, a la Floresta. Allá tenemos oficinas y un tinglado donde se practican las actividades ahora».
«Los vecinos, los socios ayudan muchísimo, hacemos todo entre nosotros, si tenemos que hacer tortas fritas, cortar entradas, lo hacemos», puso relevancia.
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«Nuestro club beca a chicos que no pueden pagar la cuota mensual»
Juan Arbitelli es presidente del Club Neuquen. El dirigente defendió la pronunciación del nombre del club y explicó: «Se dice Neuquen, a diferencia de Neuquén, porque `no es por la provincia`». En este sentido, mencionó: «Fue por unas zapatillas, que uno de los dirigentes que fundó el club, usaba y se le decía Neuquen, sin tilde. Hay una canción de un cantautor uruguayo, Tabaré Cardozo, que dice ` llevo tu acento y tu forma de caminar`. Yo creo que el club implica eso, si bien acentuamos mal, para nosotros está bien«.
«Las políticas de becas son para deportistas de mayores niveles de competición del que tienen los clubes como el nuestro. Las becas que tiene nuestro club son para chicos que no pueden pagar la cuota. El Neuquen es un club amateur, con poca profesionalización de sus jugadores, que en general representan al club, en Paraná y muy poco en la Federación provincia,».
Respecto de la consulta de la gente sobre el pedido de climatización de las piletas, mencionó: «Cuando llegamos al club hace dos años pedimos presupuesto, ahora ni queremos preguntar por los costos, es un proyecto que le debe andar en los siete millones de pesos, por lo que hoy no es factible».
Y respecto a la comparación con un club cercano, Paracao, Arbitelli subrayó: «Se trata de dos modelos de clubes distintos, el nuestro es mucho más familiar. Tiene la característica de que tenemos cuotas más bajas, el deporte más popular de todos que es el fútbol y se ha generado una diferencia. Paracao ha crecido en términos estructurales, pero lo que tiene el Neuquen es la identidad en el sur, y eso es algo que hemos explotado: si alguien recorre diez minutos el sur de Paraná, de Racedo hacia Oro Verde, `se va a cruzar` una remera de Neuquen y si no se la cruza es porque no pasó por el sur. Esto es un valor impresionante».
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El conductor Lalo Foncea aseveró que «el club es un lugar de contención, de recreación, es semillero de deportistas de alto rendimiento. La ley 27098 habla de muchísimas cosas y aplica para los que tienen 50 socios como piso y hasta 2000″. En Paraná hay 90 clubes.
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Los clubes han atravesado situaciones muy difíciles por las demandas que los gremios de entidades deportivas generaron
La periodista Claudia Yauck, opinó que «más allá de las normas que existen, los clubes han atravesado situaciones muy difíciles que muchas veces no estuvieron ocasionadas por la situación económica, sino por las demandas que los gremios de entidades deportivas generaron. Por ejemplo, los sueldos altísimos para el personal que colapsaban las finanzas de las instituciones».
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El club es un lugar de encuentro
La periodista Luz Alcain aseveró que el club es «además de un espacio para practicar un deporte, el lugar para pasar un momento divertido, en familia, es también un lugar de encuentro».
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El deporte une
La periodista Ana Tepsich destacó el trabajo que llevan adelante los dirigentes «que requiere que se lo haga a mucho pulmón. Los niños y jóvenes de manera sana, juegan, aprenden. El deporte los une y ayuda mucho».
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Hay que tener en cuenta las políticas públicas que se toman para apoyar los clubes
El periodista Sebastián Martínez, indicó que «cuando pensamos en club de barrio y toda la tarea de contención social, de desarrollo y la importancia que tiene a la hora de inculcar valores a los chicos y jóvenes, tenemos que pensar bien las políticas públicas que se toman a nivel municipal, provincial y nacional para apoyarlos. En Entre Ríos hay una Ley del Deporte Profesional que les da a los clubes un millón de pesos, 500 mil y más. Para un club de barrio son números que serían una gran solución».
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Un club es un sentimiento en un barrio
El panelista Mariano Kohan, dijo que «el club no es solamente la protección para los pibes frente a conductas dañinas. Es un montón de cosas. Es la cultura del encuentro, del esfuerzo compartido, es poner algo que es tuyo y que lo van a disfrutar los que vengan después. Son creaciones intergeneracionales. Un club es un sentimiento en un barrio. Vive mucho de acuerdo a cómo está la generalidad de la comunidad».